Hoy 18 de noviembre es día de mi Chinita, de la Virgen de la Chiquinquirá. Generalmente hoy cierran las celebraciones que mueven a Maracaibo y al estado Zulia desde el 1 de noviembre. Hay música, baile, gente en la calle, procesiones, muchos eventos religiosos y culturales, amaneceres gaiteros (conciertos que duran toda la noche desde el 17 al 18 de noviembre y que se ofrecen por todos lados de la ciudades, a diferentes precios incluso hasta gratuitos. Hay un gran movimiento de músicos nacionales e internacionales). Es una época esperada por muchos, a la Chinita se le celebra con alegría y devoción. La ciudad se adorna, los entes gubernamentales tienen un presupuesto para eso, para las luces, los adornos y las actividades al aire libre para los ciudadanos. El "encendido de la avenida Bella Vista" en una fiesta ya establecida en la que los niños disfrutan muchísimo viendo metros y metros de calle adornados con figuras navideñas llenas de luces. Hay ventas de comida, dulces, chucherías. Es un gusto pasar por allí. Las familias gozan. También se elige a la reina de la feria; es un evento tradicional, que se acompaña con música y tiene mucha presencia en los medios. Viviendo lejos de Maracaibo, en mi casa pongo los adornos de Navidad y las luces antes del 18 de noviembre porque la tradición sigue en mí.
Este año, al no ver movimiento ni fotos de mis amigos/familia durante la feria, le pregunté a mi mamá, a lo que me respondió:
"Hija, sí hubo feria pero en un tono mucho menor que antes. La alcaldía dijo no tener dinero para fiestas y se concentró en pocas actividades religiosas y culturales que estuvieron muy bien. La gobernación solo adornó parte de la av. Padilla y el parque Urdaneta donde hubo presentaciones de grupos y cantantes nacionales, pero poco tiempo. La av. Bella Vista no se adornó. A nivel privado hubo amaneceres en el hotel Maruma y el Intercontinental, que yo sepa, con escasa publicidad. No se eligió la reina de la feria, la gobernación eligió la reina chiquinquireña, con 0 publicidad, nadie sabe quién es."
Un patrimonio cultural reducido por la precaria situación de Venezuela... ay, mi reina querida, el corazón se me arruga.