Hace dos días ya que Brasil perdió 7 a 1 frente a Alemania en la semifinal del Mundial de Fútbol Brasil 2014.
Hace dos días que pasó esto y todavía estoy en shock y tal vez por eso me he tardado tanto en venir a escribir a mi blog.
Pongo esa imagen allí porque ya no se encuentra en el internet una foto decente del partido, todas son memes y más memes haciendo burla de este encuentro, lo cual no me sorprende y entiendo perfectamente.
A mí lo que me sorprende es que esto haya sudedido. Y hay gente que no entiende el nivel de repercusiones que esto trae porque no comprende que más allá del fútbol esto es un hecho histórico y cultural. Sí, cultural. El fútbol es parte de la cultura de Brasil, entonces, lo que pasó se convierte en una puñalada al estómago de todos y cada uno de los brasileños. Si todavía hablan y se lamentan del Maracanazo que fue en 1950 y en el que Brasil perdió ante Uruguay en la final del Mundial que fue precisamente en Brasil, imagínense el impacto generacional que tendrá el 7-1 frente a Alemania. Jamás se podrán recuperar de esto.
Drama, tragedia y ridículo. Un titular de un periódico en 1950. Drama, tragedia y ridículo.
¿Qué quedará para el 2014 y el resto de la existencia del mundo?